El encuentro del ser, el manejo de energía, la espiritualidad, y temas de este tipo, a algunos puede sonar a esoterismo. Ese mundo desconocido y oculto, que se encuentra dentro de nosotros. Pero en realidad, es un tema tan importante, como las personas que trabajamos, vivimos, y nos relacionamos en el día a día. Las empresas suelen ubicar un viaje de incentivos, como un lugar para “vacacionar” en la playa, o algún destino comercial, para distraerse de la vorágine de las responsabilidades diarias. Y hasta hoy, ha funcionado. Pero es cierto, que cada vez más, se vuelve inminente tomarnos un tiempo para ver hacia dentro.
No olvidemos que en todas las empresas del mundo, se trabaja con personas, lo que se traduce a seres humanos. ¿Qué mejor que tener en tu equipo de trabajo, a seres humanos con una mayor conciencia? Invertir en el encuentro interior, es un acierto doble. Tendrás a una persona con un desarrollo interno superior, que podrá realizarse dentro de tu empresa, en mayor armonía, haciendo mejores equipos de trabajo, y buscando el bien común.
Existen retiros, o viajes espirituales de muchos tipos. En el que se trabaja con el Ser. La meditación por ejemplo, puede potenciar la creatividad y el rendimiento de una persona. El estrés bloquea, y enferma. El conocimiento de uno mismo, la paz interna, la conexión energética con otras personas, y el pensamiento positivo, son una nueva manera de incentivar a tu materia prima. Tener en tu equipo de trabajo personas positivas y empoderadas, creará empresas equilibradas.
Los líderes necesitan encontrarse, aceptarse y comprenderse, para después inspirar y contagiar. Aislarnos por algunos días del ritmo acelerado de agendas llenas, juntas interminables, y solución de problemas, puede generar un impacto inmediato de productividad en nuestros empleados, pero si aprovechamos esos mismos días para un viaje de encuentro interior, el resultado será exponencial. Empieza a romper paradigmas, y rodéate de seres humanos completos, que reflejarán su armonía en todo lo que emprendan.