En nuestra reciente incursión a Oaxaca para generar nuevos productos turísticos a través de la metodología Incubatour, apoyamos a la creación de experiencias extraordinarias para los turistas. Y entre las más destacadas del estado, está sin duda El Flechador del Sol de la Montaña Sagrada en la mixteca alta oaxaqueña. Para esta aventura, hay que darse cita en la población de Tlaxiaco, para de ahí partir a la mixteca alta, a las montañas El Carrizal donde se encuentran las cabañas del mismo nombre y el cual será nuestro punto de partida.
Al amanecer iniciamos el recorrido para subir la montaña sagrada y para ello, nos encontramos con Irma, la chamana que nos acompañará en todo nuestro camino. Lo primero que hace es una ceremonia introductoria, en la cual se “curan” las flechas que lanzaremos como los nuevos flechadores del sol. Cada una de ellas, lleva el nombre de las cargas emocionales que tenemos los seres humanos como el odio, el rencor, el coraje, la envidia, los celos, el dolor, etc. Cada asistente elige tres flechas (con sus respectivas cargas emocionales) y comenzamos el ascenso a la montaña. Parte del ritual de desprendimiento, es cargar las tres flechas seleccionadas en una “cuja” (contenedor para transportar las flechas) sobre la espalda. Si subir la montaña no es sencillo, se hace aún más complicado transportando flechas con tan negativa carga.
En lo alto de la primera montaña, la chamana Irma hace una ceremonia para saludar a los cuatro puntos cardinales y posteriormente continuar con los diferentes pasos del ritual, en el que Irma nos explica qué es lo que vamos a realizar para deshacernos de nuestras cargas emocionales.
Posteriormente se realiza una fila india, cada quien toma una flecha y uno por uno lanza la flecha hacia el cielo en dirección a la montaña sagrada. Cada vez que el flechador lanza la flecha, con un grito de alivio expulsa la carga negativa de la cual se acaba de liberar. Y así, uno a uno cada flechador del sol, lanza sus 3 flechas para descargar sus penas emocionales.
Para continuar con el ritual, cada uno de los flechadores nos sentamos en el piso y la chamana, hace una meditación que termina con la palabra “Ometeotl” que significa el equilibrio entre las fuerzas del bien y el mal, de la luz y la obscuridad y la dualidad entre fuerza femenina y masculina. Posteriormente el ascenso sigue en la montaña y por cada paso que se da y uno voltea hacía atrás, los paisajes son impresionantes e indescriptibles.
Ya en las alturas, el punto culminante es llegar a una mítica cueva en la que la chamana hace una limpia a cada uno de los visitantes. después de ello, liberados de sus cargas emocionales y satisfechos de haber ascendido la montaña sagrada, los nuevos flechadores comienzan el descenso de la montaña sagrada. El premio a ello de nuevo son los paisajes y las espectaculares vistas pero sobre todo la satisfacción de haber vivido esta extraordinaria experiencia.
Este es uno de los grandes productos de Incubatour 2016, que muy pronto podremos disfrutar. Si quiere experimentarlo y deshacerse de sus cargas negativas, no deje de visitar a mi amigo Armando Montes, para vivir a su lado, la gran experiencia de ser un Flechador del Sol en las montañas sagradas de la mixteca alta oaxaqueña.
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