Los viajes de incetivos deben de ser diseñados para motivar a lograr objetivos predeterminados por la empresa, además son un excelente sistema para aumentar la fidelidad de los clientes, motivar a los equipos de ventas y promover ventas, y lo mas importante es que una adecuada planeación los hace totalmente autosustentables.
A diferencia de otros premios, el viaje fomenta la ilusión, el entusiasmo y el deseo de las personas ya que estos viajes son exclusivos, creativos, atractivos y hacen sentir a los participantes únicos, especiales y reconocidos entre sus compañeros y los grandes ejecutivos de la empresa, ademas de que implica una gran participaciòn emocional de quienes toman parte y crean vínculos fuertes entre los mismos, lo que a su vez los convierte en excelente herramienta de marketing.
Es muy importante que cada viaje sea cuidadosamente hecho a la medida de las necesidades e intereses de los participantes.
La variedad es interminable pero los detalles, originalidad, personalización y experiencia deben de estar siempre presentes para hacer de esta experiencia algo único, deseable y sobre todo inolvidable.
El objetivo es crear una estrecha relación entre las personas que participan y fomentar los valores de la empresa.
Para organizar un viaje de incentivo se debe de tomar en consideración la edad promedio de los participantes, condición física y aficiones, no repetir viajes, buscar siempre programas nuevos, creativos, etc, para lograr conseguir el impacto entre los aspirantes al mismo.
Todo esto contribuye a que todas las personas que forman parte de una empresa, piensen en los objetivos a cumplir de la misma y al mismo tiempo se comprometen emocionalmente para repetir la experiencia el año siguiente.
El resultado final es que la empresa logro y en muchos casos supero sus objetivos.
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