Hoy día todo el mundo dice que “crean experiencias” y bueno eso es cierto, ahora que sean buenas y memorables es otro boleto!.
Rumbo al 2020 ya no podemos negar que los intereses y las formas de vivir y recordar de los seres humanos efectivamente cambió y no es ninguna moda, si tu servicio no impacta emocionalmente a tus clientes y visitantes, te será muy difícil mantenerte dentro de sus preferencias y serás relegado a la zona de “guerra de precios”.
Sin embargo, hay marcas que si lo han entendido muy bien, saben que hay pequeñas cosas que impactan muchísimo en sus clientes y visitantes, pequeños rituales repetitivos pero que para cada persona son únicos, que genera una memorabilidad y unas enormes ganas de volver y de contárselo a todo el mundo… bien eso es lo que buscamos los generadores de experiencias.
Hay 3 ejemplos bastantes sencillos que incorporaron 3 marcas, espero que hayan muchas otras, rituales que no se dicen, que solamente lo viven las personas cuando están en la presencia total del servicio o la marca, son estrategias para impactar adicionales a tu desempeño en el servicio primario:
- Air Tahiti Nui: es la aerolínea bandera de la Polinesia francesa, antes de aterrizar distribuyen entre sus pasajeros flores de tiare, emblema central de la cultura de la polinesia, conectando en ese mismo momento las expectativas de los viajeros con el olor natural de la Polinesia, dándoles una inesperada y memorable bienvenida.
- Hotel Santa Clara Legend Cartagena: Este hermoso hotel, que fuera un antiguo convento colonial, se encuentra dentro de la Ciudad amurallada de Cartagena. Aquí si estás en el lugar adecuado a la hora adecuada ( 6:00pm) empezarás por escuchar los más hermosos cantos gregorianos, seguido por un delicioso olor a incienso que despertará toda tu curiosidad para que luego presencies una procesión de monjes, inmutables a tu presencia, que empiezan a encender todas las velas de las áreas comunes del hotel. Por un momento realmente te sientes en la época colonial y te deja asomarte un poco a lo que fue la vida en ese lugar en tiempos lejanos.
- St. Regis: a las 4:45 a 5:15 pm dependiendo de la época del año, tiene lugar un ritual impactante para sus huéspedes el “Champagne sabering” o el “ritual de la tarde” que data del año 1904 cuando John Jacob Astor fundó el primer hotel de la cadena en New York, donde el sommelier del hotel destapará botellas de champagne con un sable para agasajar a sus huéspedes, una ritual convertido en tradición que muchos buscan y añoran en una marca que bien los sabe emocionar.